Salida a los Picus (Sotres, 16-18 sept.)

Esta vez va de monte. ¡Cómo echaba de menos una salida a la montaña! La sensación de olvidarte del reloj, andar y ascender por el placer de tener otro punto de vista del cual no todo el mundo disfruta, viajar, conocer y, como no, la compañía, hacen que al menos cada septiembre la sección de Alta Montaña del Club Mirandés de Montaña planifique una salida a los Picos de Europa.

 

El Naranjo de Bulnes desde la cima de Peña Castil

Así que, amoldando la dificultad de las ascensiones previstas al nivel de la gente que íbamos, salimos el viernes 16 hacia Sotres, pueblo que iba a servir de lanzadera para nuestros propósitos.

Como la ruta circular prevista, con la ascensión de Peña Castil, era de casi 17 km., decidimos acercarnos con los coches hasta Las Vegas, y comenzar el pateo desde allí; así nos quitábamos unos kms. de pista y carretera. El sábado amaneció con una densa niebla; pero para eso están los GPS's, para establecer la ruta y seguirla.

Los pastores que íbamos encontrando mientras ascendíamos, trataban de enviar el ganado a los pastos de menos altura, por aquello de tener a las reses controladas. Mientras tanto, nuestro semblante sudoroso empezaba a esbozar una sonrisa cuando alcanzábamos la cota 1.700; la niebla se disipaba y comenzaba el grandioso espectáculo visual que son los Picos de Europa. Con alguna parada para echar un bocado, llegamos al Collado Cambureru (2.056 mts.); a partir de ahí, el Peña Castil ofrecía su gran pala Norte para ser ascendido. Con algún tramo pedregoso, pero sin dificultad, llegamos a la cumbre. Reponer fuerzas, tumbada bajo el sol y, por supuesto, que no falte la foto de cumbre. Destacar el descaro de una chova piquigualda a la hora de pillar comida, que se dejó hacer fotos a pocos cms. hasta que se llevó del pico ¡media barra de pan!.

Para el descenso, partiendo del mismo collado Cambureru, fuimos por detrás del Cabezo Tortorio y el Coterón hasta la Horcadina Las Moñas. Desde allí, bajaríamos buscando el camino que viene desde el Refugio Urrellu hacia el collado Pandébano.

Cumbre de Peña Castil, de 2.446 mts.

Ya en Sotres y después de la ducha, bajamos a la tienduca que tiene el Hotel Casa Cipriano y dimos buena cuenta de la variedad de quesos que tiene para degustación. También compramos, ¡eeeeh! ...y cayeron unas cuantas botellinas de sidrina. Por cierto, el personal del hotel cuenta con mucha experiencia en la montaña, y nos asesoraron en todo momento sobre las opciones del entorno.

Comenzaba a llover al final de la tarde, así que toda la actividad en Sotres se limitó a cenar, y a catar unos orujines en los distintos establecimientos que tiene el pueblo. Gente maja de veras.

Del domingo poco voy a decir, pues con mucho frío nos limitamos a subir por la carretera de Tresviso al aparcamiento del Jito de Escarandi. Desde allí, metidos en el Macizo de Andara, alcanzamos el refugio del Casetón de Andara con la intención de hacer el Pico del Sagrado Corazón, también llamado Pico San Carlos o la Morra de Lechugales. Pero una lluvia fina e intensa hizo que nos quedáramos más tiempo del esperado en el refugio escuchando muchas anécdotas que un guía de montaña (Xuxo) nos contaba. Finalmente, y por ceder espacio en el refugio cuando llegaba la gente calada, bajamos hacia los coches.

Objetivo: Cargar pilas ¡¡¡CUMPLIDO!!!